Fábula: La langosta y su madre
No andes atravesada y no roces tus costados contra la roca mojada, decía una langosta a su hija.
Madre, repuso ésta, tú que quieres instruirme, camina derecha y yo te miraré y te imitaré.
Moraleja de: La langosta y su madre
Antes de decir un consejo, primero dalo con tu ejemplo.
La langosta y su madre